Roberto “Robe” Iniesta, fundador y líder de Extremoduro, ha fallecido a los 63 años, según han confirmado su sello y medios nacionales de referencia. El músico deja un vacío inmenso en la cultura española: su obra marcó un antes y un después en la manera de entender el rock en castellano, combinando crudeza, poesía y una sensibilidad única.
La confirmación
La confirmación del fallecimiento ha sido difundida por su sello discográfico y recogida por medios como El País y ABC. Diversas fuentes coinciden en que el artista tenía 63 años en el momento de su muerte. Sobre la causa, varias cabeceras apuntan a complicaciones derivadas de un tromboembolismo pulmonar, problema de salud que ya le había afectado en 2024. No obstante, algunos comunicados iniciales del entorno del músico prefirieron mantener cierta reserva sobre los detalles médicos. Por ello, y atendiendo al contraste de información periodística, esta causa debe considerarse verificada por múltiples fuentes, pero con matices respecto al comunicado oficial.
Una trayectoria irrepetible
Nacido en Plasencia, Robe se convirtió en una figura indispensable del rock español. Con Extremoduro firmó álbumes esenciales como Agila o La ley innata, obras que renovaron el lenguaje del género y lo conectaron con una sensibilidad literaria muy particular. En su carrera en solitario, con discos como Mayéutica o Se nos lleva el aire, amplió aún más su universo creativo, explorando nuevos registros sin perder la esencia que lo convirtió en un referente.
Reacciones y homenajes
Artistas, instituciones culturales y miles de seguidores han expresado su dolor ante la noticia. En redes sociales, compañeros de profesión han descrito a Robe como un “poeta”, un “filósofo popular” y una “voz generacional”. Sus letras, muchas convertidas en himnos, siguen siendo un espejo emocional para varias generaciones.
Un legado que perdurará
La obra de Robe Iniesta trasciende estilos, épocas y etiquetas. Su manera de escribir, interpretar y entender la música ha influido en decenas de bandas posteriores y continúa siendo un punto de referencia para estudiosos y aficionados. Su ciudad natal y colectivos culturales de todo el país ya han iniciado propuestas y homenajes en su memoria.
Despedimos a Robe Iniesta con un profundo agradecimiento por su arte, su honestidad y su capacidad para conmover desde la verdad. Su voz seguirá resonando en cada verso, en cada riff y en cada generación que descubra su música. Su legado, inmenso, permanecerá.
Foto: Rubén Ortega. “Robe Iniesta en Valladolid en 2014”. Wikimedia Commons. Licencia: CC BY-SA 4.0. Fuente: Wikimedia Commons — Robe Iniesta en Valladolid (2014).

